INTRODUCCIÓN

El reportaje es un género periodístico propio, de carácter interpretativo. Tal y como explica El País en sus consejos periodísticos para estudiantes, este género ”desarrolla extensamente un tema de interés general. Existen reportajes sobre personas, acontecimientos, lugares… Lo importante es que trate una temática que preocupe a los ciudadanos y esté conectada con la realidad. Podemos encontrar reportajes científicos, explicativos, de investigación, de interés humano, narrativo, interpretativo o autobiográfico”.

Como señala el profesor Carlos Miguel Patterson en El buen reportaje, su estructura y características(Revista Latina de Comunicación Social, 56): ”El reportaje es una información con carácter profundo; divulga un acontecimiento de actualidad pero amplia e investiga mucho más que la noticia”.

A diferencia de la noticia, ”no tiene por qué estar ligado a la actualidad más inmediata. La inmediatez no es importante, ya que los temas tratados en un reportaje son ya conocidos por el público”. En ocasiones, una noticia puede dar lugar a un reportaje en profundidad, que se publica con posterioridad.

Según el manual de estilo del diario La Prensa de Panamá, ”el reportaje es el género periodístico que intercala la información con descripciones, introduciendo algunos aspectos literarios de interés para el consumidor informativo”.

Un buen reportaje necesita una investigación periodística. El periodista recaba datos y testimonios de diferentes personas, expertas en la materia o implicadas en el tema que nos ocupa. Tras reunir abundante información por diferentes vías, y contrastarla periodísticamente, el periodista presenta en un extenso trabajo los diferentes puntos de vista y datos recabados. Como explica El País, ”el objetivo es lograr que, a través de la exposición de diferentes puntos de vista, el lector saque sus propias conclusiones”.

Estructura del reportaje

Como es habitual en periodismo, el reportaje presenta una estructura propia en la que se repiten:

→ Planteamiento o introducción: son los primeros párrafos en los que se expone de forma exhaustiva el tema que se va a tratar en el reportaje.

→ Nudo: terminada la introducción, el periodista presenta el cuerpo central del reportaje. Se trata de la parte más extensa y variada, donde el periodista desarrolla en profundidad el tema y toda la información recabada.

→ Conclusión: el reportaje es un género interpretativo, por lo que el periodista puede presentar su propia visión a lo largo del texto. Esta se ve reforzada al final, en la conclusión, mediante reflexiones argumentadas en base a los datos del nudo.

El reportaje incorpora otros elementos periodísticos, muy variados. Imprescindibles son los elementos de titulación: título, subtítulo, antetítulo, firma, etc. Sobre el titular, suelen ser creativos. Es decir, titulares breves que llamen la atención del lector.

Otros posibles elementos son las fotografías, los gráficos, etc. En algunos casos, se pueden presentar entrevistas o videos dentro de un reportaje.

DIGITAL VS IMPRESO

Como pasa con la entrevista, el reportaje digital aprovecha los recursos del periodismo digital y se transforma en un género más completo. 

Estos recursos pueden ser los gráficos interactivos, las infografías, los enlaces externos o, todavía más complejos, los archivos de audio y video. En estos casos, pueden ser entrevistas o incluso reportajes audiovisuales independientes que completan la pieza presentada en sí misma. 

Como ejemplo, podemos ver el video publicado por el diario peruano El Comercio (2014), sobre una jornada en el famoso restaurante de Lima, Central.

También publicaron un breve reportaje escrito, sobre el mismo tema.